Al igual que en el 2009 y en el 2010, presento las que considero son las mejores entradas del 2011 en este blog. A diferencia de años anteriores, será un top 13 y no un top 10. Para el próximo año no espero muchos cambios en la forma de Los sueños de un visionario, mas sí un incremento de entradas más elaboradas, como complemento de las meramente expositivas. Como se apreciará, la presencia de Immanuel Kant en este blog ha sido rivalizada (o, más bien, complementada) por la del gran escritor ruso Fiódor Dostoievski. Sin más, veamos qué tenemos.
13. ¿Nada más que dos artículos de fe?
El blog (o sea, yo) se enriqueció ilimitadamente con una lectura más atenta de la crítica de la razón a sí misma que llevara a cabo Immanuel Kant, lo que, a su vez, permitió profundizar en el problema metafísico que significa fundamentar la moral.
Ver también:
Prácticamente libres.
Dos tipos —muy distintos— de idealismo, de acuerdo a Kant.
12. La felicidad del perro.
La concepción de felicidad aristotélica aplica a la especie canina. Un argumento a favor de por qué la felicidad es una idea filosófica (y no una descripción de nuestra actividad neuronal).
Ver también:
La virtud del pueblo japonés.
El concepto de eudaimonía de Aristóteles: Una reformulación.
El deber en la ética de Aristóteles.
11. ¿Por qué no matar a la vieja? (o una entrada sobre los imperativos de la moralidad)
Una entrada basada en el problema fundamental de Crímen y castigo. En retrospectiva, el problema tiene más potencial, y la entrada no le hace del todo justicia. Es, además, uno de los tantos intentos de juntar a Kant con Dostoievski.
Ver también:
¿La religión dentro de los límites de la mera razón? Un diálogo entre Kant y Dostoievski.
10. Play the game.
Una breve pero estética entrada donde complemento la presentación de un problema ético con una canción.
Ver también:
Music and Life.
Mona Lisas and Mad Hatters.
Lou Reed define el amor.
9. La religión dentro de los límites de la mera razón, partes I y II.
Finalmente este año se le empezó a hacer justicia en este blog a la crítica ilustrada de la religión que lleva a cabo Immanuel Kant. Más que un despecho absoluto, en realidad Kant tenía un profundo respeto por la religión en general, y la cristiana en particular; en tanto estén al servicio de la moralidad, claro, constituyen precisamente su más profunda expresión.
Ver también:
Jesús de Nazaret, una mera interpretación racional.
Un ejemplo de fe beatificante (y otro de fe de prestación).
8. El liberalismo político y la regulación de los medios de comunicación (o sobre una de las consecuencias más audaces del primer principio de justicia de John Rawls).
Este año la coyuntura política peruana fui incluso más controversial de lo común, y este blog no fue indiferente.
Ver también:
Once motivos por los que votaré por Gana Perú en estas elecciones.
No a Keiko.
Cristo sedado.
7. Immanuel Kant sobre el libro de Job (o una interpretación auténtica de la existencia del mal).
La Ilustración no rechaza la religión, sino que explicita el orden moral que le es propio. Una lectura crítica de la Biblia encontrará dentro de esta misma los principios hermeneúticos correctos para su lectura, o algo por el estilo…
Ver también:
Breve comentario al comentario de Erich Luna sobre el libro de Job (o sobre los límites de la teología).
Sobre el conocimiento propio de la metafísica (o una justificación ilustrada de la Biblia, por si alguien la pidió).
6. ¿Qué es Dios? Una concepción existencial, mística y práctica.
Erich Fromm fue fundamental en los primeros meses de este año para empezar a darle forma a mis investigaciones kantianas, que ciertamente se enriquecieron del psicoanalista y tomaron un matiz más personal y profundo.
Ver también:
Una definición ética de la racionalidad. ¿Es posible una fe racional en el progreso de la humanidad?
5. La necesidad de la idea de Dios, y una —¿verdadera?— declaración de amor (o una entrada doble sobre Los hermanos Karamázov).
Supongo que uno puede marcar varios antes y después en su propia vida. Uno que se me ocurre está marcado por mi lectura de Los hermanos Karamázov, de Dostoievski, en mi humilde opinión la mejor novela jamás escrita. Su influencia en toda la modesta filosofía producida aquí es evidente, y lo seguirá siendo.
Ver también:
Amor humilde.
El superhombre de… Dostoievski.
4. El agnosticismo (o sobre la posibilidad de la existencia de un ave reptil gigante que controla todo).
Nadie trata problemas morales de forma tan penetrante como Trey Parker y Matt Stone. Ya era hora de que el agnosticismo sea ridiculizado como una posición intelectual en sí misma vacía.
Ver también:
Super Mejores Amigos.
¡Feliz día de San Pedro y San Pablo!
Do’s and don’ts of Reason (o cómo usar bien nuestra racionalidad).
3. ¿Qué es el corazón? (o sobre el misterio en la ética de Kant).
Esta entrada marca el inicio, propiamente, del tema que me ocupará buena parte del próximo año, en el que concluiré mi tesis de Maestría sobre el mal radical en la ética de Kant. Un aspecto descuidado, el corazón en las obras sobre ética de Kant delimita el lugar donde colindan la razón y la sensibilidad, y que nos resulta en última instancia insondable.
Ver también:
¿Qué es la verdad? (o sobre la existencia de una ley moral).
Deontología del corazón.
2. Ideas dobles (o sobre lo insondable en las propias motivaciones).
El príncipe Myshkin, encarnación del ideal de moralidad de Dostoievski, no podía faltar en este Top 13. Si bien meramente expositivas, las entradas basadas en sus ideas constituyen buena parte de la carne de este blog este año que se acaba.
Ver también:
La aniquiladora crítica al catolicismo del príncipe Myshkin.
Las cuatro historias del príncipe Myshkin: una «refutación» del ateísmo (o sobre lo que es propio de la religión).
1. Lawrence of Arabia: la historia de un profeta moderno.
Ya estaba presente tan pronto como en febrero la semilla de lo que significaría el problema fundamental que finalmente será el centro de mis investigaciones filosóficas para el año que viene (así como de mi tesis de Maestría), y que se ha vuelto explícito en el último mes. me refiero a lo insondable de las motivaciones humanas y cómo puede encajar esta esfera inevitablemente existencial, donde habita una experiencia profundamente religiosa en una teoría ética sostenida en la racionalidad.
Mención honrosa: El pisco sour ideal.